
Queremos mantener y potenciar el vínculo con los usuarios de la Fundación (becarios, artistas, músicos, alumnos, etc.), por lo que debemos crear un espacio de participación donde se lleven a cabo acciones que sean lo suficientemente atractivas para que éstos participen, este lugar de interacción lo hemos denominado ecosistema social colaborativo.
¿Se te ocurren métodos que estimulen la participación? ¿Qué tipo de ecosistema social colaborativo crearías?
La empresa
El apoyo a la formación, que ha sido constante desde nuestra creación, es uno de nuestros objetivos prioritarios. Impulsamos la formación, tanto de forma presencial, como a través de los diversos programas de becas. Centramos nuestros esfuerzos en la formación para la excelencia, la promoción del talento y el fomento de la empleabilidad.
En el ámbito de la acción social desarrollamos actividades y proyectos de mejora de la calidad de vida y el bienestar de los colectivos más sensibles de nuestra sociedad; luchamos por la inclusión social y la igualdad de oportunidades.
Nuestro compromiso con la cultura se manifiesta a través de una amplia oferta de exposiciones, conciertos, concursos y publicaciones, que forman parte de nuestra programación de actividades cada año
Todos los participantes y beneficiarios de estas actividades pasan por la Fundación de manera puntual y continúan sus carreras profesionales y artísticas. Posteriormente, la mayoría no mantiene vínculos con la Fundación por lo que se hace indispensable fomentar estas relaciones a largo plazo para potenciar e incrementar la eficacia de su labor en la búsqueda el progreso y el bienestar de la sociedad canaria.
Transcurridos 25 años desde las primeras becas, y tras dos años del inicio del programa de especialización y prácticas profesionales en EEUU es el momento de crear un ecosistema social colaborativo con el que la Fundación realice una clara apuesta por las sinergias, puentes y relaciones que puedan crearse entre sus miembros y que sin duda redundarán positivamente, tanto en las actividades que organiza como en la trayectoria personal y profesional de los becarios, artistas, alumnos y colaboradores que formarán parte de ella.
El reto
Se trata de construir un ecosistema social colaborativo. Sabemos lo que queremos conseguir, pero tenemos que definir la forma de llevarlo a cabo, determinar cuáles serán las principales líneas de actuación, qué valor aportará tanto a la institución como a sus miembros, así como establecer la manera de interactuar con los miembros del ecosistema.
Para el desarrollo de este proyecto los estudiantes entenderán por sí mismos las herramientas, no necesitan formación específica.